por Carlos PISSOLITO
Que el 2020 ha sido el Año de la Pandemia, ya no hay quien lo niegue. Resta ver si el 2021, será el de la Vacunación. Veamos.
En principio, varias vacunas han sido desarrolladas y probadas. Todas ellas pugnan en lo comercial; pero también en lo geopolítico, por satisfacer un mercado potencial que abarca a casi toda la población humana.
Ya la misma pretensión, le pone límites a la ambición y a la idea de que pronto pueda lograrse algo parecido a la enunciada inmunidad de rebaño. Al menos en la mayoría de los territorios.
De hecho, ya hay y habrá muchas más diferencias, entre los países ricos que pueden comprar las dosis necesarias para inmunizar a su población, de los que no puedan.
Del otro lado, el de la Naturaleza, el de Dios o el de los genios que lo inventaron, el virus sigue su marcha inmutable por el dominio global. ¿Serán efectivas las vacunas frente a sus sucesivas mutaciones? Nadie lo sabe con certeza.
Varios países, entre ellos la Argentina ya jugaron la carta dura de la cuarentena. Hoy, otros más reacios como Alemania y la Gran Bretaña que vuelven a ponerla sobre la mesa. Pero, como se dice, nunca segundas partes fueron buenas.
Por otro lado, las consecuencias geoeconómicas de la 1er cuarentena están muy a la vista, para creer que una 2da no tendría consecuencias, aún, más dramáticas que la 1ra.
En resumen: un escenario plausible para el 2021 sería un mundo, más o menos cerrado, con libre o limitada circulación, solo para aquellos que puedan acreditar su inmunidad al virus. Pero, intuimos que no será suficiente para evitar otra legión de problemas. Globales y locales.
***
1 comentario:
Spengler consideraba al escéptico más bien como ese jinete capaz de cabalgar el tiempo que le toca, muy afín a Evola...
Publicar un comentario