Estrategia - Relaciones Internacionales - Historia y Cultura de la Guerra - Hardware militar. Nuestro lema: "Conocer para obrar"
Nuestra finalidad es promover el conocimiento y el debate de temas vinculados con el arte y la ciencia militar. La elección de los artículos busca reflejar todas las opiniones. Al margen de su atribución ideológica. A los efectos de promover el pensamiento crítico de los lectores.

lunes, 10 de agosto de 2015

La Guerra de Maniobras.

LA MANIOBRA Y LA ESTRATEGIA EN LA GUERRA.





Sebastián Tepedino


   ¿QUÉ ES LA ESTRATEGIA?

     Realizando una fugaz y somera singladura, podemos decir que la Estrategia en nuestro ajetreado mundo moderno está siempre presente, en cualquier acción en la que interviene el ser humano, sea al interactuar con sus semejantes, negociar o al relacionarse con otros grupos, la estrategia siempre se cuela en los intersticios que deja la actividad humana. Cuentan que el General Perón le consultó al General Guglialmelli que le definiera el concepto de Estrategia, Guglialmelli le replicó: “...Mire, mi General, La Estrategia es Planeamiento, es intentar aprehender la dimensión temporal de las decisiones políticas, así como no hay Estrategia sin Planeamiento, tampoco hay Planeamiento sin Inteligencia...”.
El Cnl John Boyd de la USAF, creador del ciclo OODA.

      La Estrategia como palabra existía desde hace mucho tiempo, la estrategia es como esas palabras que aparecen en la modernidad pero cuyo concepto estuvo presente siempre en la historia del hombre. Es como el Dogma Católico, siempre existió como verdad revelada hasta que un papa la promulga y a partir de ahí tenemos obligación de creer, pero existió siempre, la Asunción de María, La Inmaculada Concepción, el Espíritu Santo, incluso la palabra Geopolítica, existe desde la noche de los tiempos en la historia, Sun Tzu y los “Vou-King”, Tucídides, Napoleón decía que la geografía condiciona, influencia o determina la política de las naciones, 80 años despúés Rudolph Kjellén, geógrafo sueco inventa el término Geopolítica con una definición similar a la Napoleónica: “...Es el influjo de los factores geográficos en la vida política de las naciones...”. Cuando el Emperador Napoleón hablaba de la “Táctica Superior” o “Táctica Sublime”, Clausewitz ya la había transformado en Estrategia.

       Karl Von Clausewitz, notorio y remarcable General Prusiano en su libro “Vom Krieg” (De La Guerra) Libro I, Capítulo I, señala sin ambages: “...Táctica son los enfrentamientos, y Estrategia es el uso del resultado de esos enfrentamientos para lograr el fin de la guerra...”, después hay otras definiciones no tan prístinas, por ejemplo La Escuela Beaufriana señala que la Estrategia es “...El arte de la dialéctica de voluntades que utilizan la fuerza para resolver su conflicto...” tampoco es una definición aséptica, porque se aplica más que nada a nivel estadual, entre estados. El concepto militarista languidece con la escolástica de Beaufre, que  amplía el concepto de estrategia apartándose de la concepción clausewitziana y encarrilando el concepto de marras, no sólo en términos de Guerra sino en términos de Paz, lo mismo la Escuela Anglosajona aplica tal concepto en la Guerra y la Paz pero la limita exclusivamente al núcleo duro, es decir al poder militar.




        La Estrategia pues, para algunos es una ciencia, para otros es un arte o incluso una combinación de ambos. Antiguamente era conocida como la “Ciencia del General” o como el “Arte de Conducir Operaciones Militares”. Se erige del clivaje entre 2 palabras griegas “Stratos” que significa “conjunto de gente”, “pueblo”, “ejército” y “Egos” que viene de “Ego” que es aquel hombre que los guía en el campo de batalla, el “Estratega” palabra que por analogía devino en “Estrategia”. Conforme avanza el tiempo, en su transcurso, la concepción militarista, prusiana, belicista va languideciendo, al punto tal que la estrategia se extiende a otros ámbitos y se la define como la “Traza o la Habilidad para Dirigir un Asunto”. La Estrategia en sí no es más que una categorización “Fines-Medios”. La Doctrina Militar Conjunta de las FFAA inspirada en la Corriente Beaufre señala que la Estrategia es “...El arte de conducir o emplear el potencial nacional en la paz o en la guerra, para concretar la política establecida...”. Siempre focalizando   las acciones sobre una actor contingente que tiene voluntad inteligente y cierto grado de libertad de acción para fijarse fines y desarrollar los medios necesarios para cumplir ese fin. En virtud de ello, en numerosos cenáculos se adoptó otra definición más, la que señala que la Estrategia es “El ejercicio de la racionalidad interdependiente” ¿por qué? Porque a mis medios y mis fines se van a oponer los medios y fines de un eventual opositor.

      LA GUERRA DE MANIOBRAS
     
         Si bien la terminología “Guerra de Maniobras” no puede considerarse una antigualla, tiene profundos antecedentes, es un conjunto de ideas pergeñadas por el Coronel de la USAF John Boyd, es un concepto que se configura en la trastienda de la compulsa bipolar y del colapso de la URSS en 1991. Las ideas de Boyd fueron plasmadas en publicaciones del Cuerpo de Marines (US Marine Corps) a instancias de William Lind que elaboró el “Manual de la Guerra de Maniobras”1, publicación que en la Argentina, vió la luz por gestiones de la editorial del Círculo Militar. Las ideas de Boyd encuentran sustento en numerosas batallas que ha enriquecido la historia militar, notablemente en la IGM y la IIGM (especialmente con el concepto de “Blitzkrieg”). William Lind señala en el capítulo I:

       “...La guerra de maniobras no es nueva, probablemente data de la primera vez que un hombre de las cavernas sorprendió a un enemigo desde atrás en lugar de pelearle garrote contra garrote...”.

       Lind hace una exégesis del pensamiento de Boyd, señalando los antecedentes históricos del concepto “guerra de maniobras”, verbigracia el caso de la “Guerra Civil Americana” (Campaña del Valle) a su vez, pone énfasis en la ofensiva alemana de 1918 donde predominó la infiltración, también el caso de la “Guerra Relámpago” incoada la Segunda Guerra Mundial, entre otros ejemplos. Lind igualmente utiliza el concepto de maniobra para referenciar su teoría de la evolución de la guerra a partir del clivaje en generaciones, que no representan continuidades sino rupturas, es un salto cualitativo desde una generación hacia otra. Esto ha sido muy bien detallado en un enjundioso artículo publicado en el “Marine Corps Gazette” intitulado “The Changing Face Of War Into The Fourth Generation” es decir “El Cambiante Rostro de la Guerra, Hacia la Cuarta Generación” dónde describe cuatro generaciones de la guerra, la tercera generación está dada por la maniobra, la movilidad estratégica en nupcias con la potencia de fuego, la figura distintiva de esta generación es EL TANQUE, y otros elementos que operan con maniobra y potencia de fuego (Blindados, Aviones, Buques). El Coronel Boyd realizó los pertinentes estudios sobre las batallas terrestres para refinar el concepto, sin embargo, la guerra de maniobras no aparece incoada las batallas terrestres, sino con el estudio de ejercicios simulados de combate aire-aire (1974) cuyo basamento se encontraba en los combates aéreos durante la Guerra de Corea. Pese a que hoy, las teorías de la IV generación (de conflictos con apoyatura en cuestiones psicosociales y culturales más que en cuestiones militares y de empleo del núcleo duro como última ratio) han ganado pantalla, la III generación sigue manteniendo vigencia, porque es la expresión más acabada del potencial militar operando en tres dimensiones (Tierra-Mar-Aire).

        El conflicto según la teorización de John Boyd puede ser dimensionado en función de:

OBSERVACIÓN
ORIENTACIÓN
DECISIÓN
ACCIÓN

        Cada parte envuelta en el conflicto debe observar, observación introspectiva, observación del marco geográfico, los alrededores físicos y las capacidades del enemigo. A caballo de la Observación se procede a la Orientación, es decir, se elabora una suerte de “cuadro de situación” mental de lo antedicho. La Orientación deviene en Decisión, en la toma de una decisión, de resultas de lo cual, lleva a la Acción, se actúa asumiendo que la situación ha cambiado. Las características de este ciclo es que se retroalimenta (feedback), se observa de nuevo y comienza el ciclo otra vez. Este proceso es frecuentemente llamado “CICLO BOYD” o “CIRCUITO OODA” (Observación-Orientación-Decisión-Acción)

        A continuación para dar sustento y respaldo a esta categorización evocaremos una serie de ejemplos históricos donde se ha evidenciado la utilización y la aplicación del concepto de “Guerra de Maniobras”, así como del Ciclo OODA, la maniobra estratégica en la guerra ha estado presente desde siempre. La historia militar nos ofrece una visión realmente vasta y enriquecedora en lo que refiere a batallas, ejércitos y conductores estratégicos que, valiéndose de la audacia, en incontables acontecimientos militares han utilizado su ingenio durante las contiendas. Los ejemplos son expuestos sin mantener un orden cronológico.

OPERACIÓN ANACONDA (AFGANISTÁN 2002)

      Una Operación militar donde se aplicó el concepto de Guerra de Maniobras fué sin dudas la “Operación Anaconda”, ejecutada el 02 de Marzo del 2002, llevada a cabo por Estados Unidos y sus Aliados contra las tropas Talibanes y elementos discordantes de Al-Qaeda. El desarrollo de la acción fué el siguiente: La operación se realizó en Marzo, en el cual todavía era invierno en el país afgano y según todas las demás guerras realizadas en este país, siempre se frenaban las hostilidades al incoar el invierno con el fin de reagruparse, reordenar planes e instruirse para reanudar las operaciones en el verano. Con la guerra ruso-afgana, los afganos ejecutaron el mismo procedimiento, se reagruparon en invierno y durante el verano utilizaron acciones de guerra asimétrica para derrotar al Ejército Ruso. Tomando como parangón o cotejo la experiencia de guerra ruso-afgana, el Ejército Aliado operó directamente donde se encontraba el enemigo, sin importar la estación del año, si era verano o invierno, generando con ello la lógica interrupción del CICLO OODA por parte del enemigo y produciéndose así, un desequilibrio a favor del Ejército Aliado.

      Podemos concluir que la rapidez en la toma de decisiones coadyuvó al éxito, produjo el desequilibrio y posterior desarticulación del enemigo, que no se pudo lograr sin la acción conjunta de las armas combinadas (Elementos Aeromóviles, Elementos de Fuerza Aérea, Elementos Motorizados y FFEE) dando como resultado una importante y no mensurada pérdida logística y personal que le costará a los elementos terroristas de Al-Qaeda, por lo menos 3 años para poder reorganizarse de nuevo.

INVASIÓN RUSA A FINLANDIA (1939)

     Incoada la Segunda Guerra Mundial (IIGM) y luego de la invasión de Polonia por parte del “Eje”, los rusos invadieron finlandia. Esta operación estuvo enmarcada en un sinnúmero de contingencias y problemas para los rusos que no se esperaban inicialmente. Aunque resulte complejo de creer, esos problemas eran ocasionados por parejas de esquiadores que efectuaban emboscadas en los caminos a la columna de tanques rusos. Las emboscadas se efectuaban luego de maniobras de evasión. Adoptaban la posición más favorable y ponían fuera de combate al primer o segundo tanque de la columna, con lo cual, el resto de la columna debía obligatoriamente detener su avance ocasionando que la operación de marcha se retrasara mucho más de lo previsto. Esto tiene que ver con las llamadas “fricciones”, que es un término tomado de las ciencias mecánicas, la fricción en síntesis quiere decir que la guerra que yo pienso, la forma de hacerla es completamente distinta cuando la paso del papel a la realidad, y allí tenemos desde el conductor cansado que colisiona el camión y demora la columna, los materiales que se desgastan, el enemigo que hace lo que se le da la gana y no lo que yo quiero, el clima que se adelanta y cambia entonces pues, esto produce una fricción que marca una diferencia entre la guerra teórica y la guerra real. La dificultad del terreno y del clima complejizaron el derrotero ruso. Los caminos de montaña al ser muy angostos, provocaban que las marchas se hicieran duras y pesadas, y en el momento menos pensado por los rusos, otra emboscada de esquiadores los ponía nuevamente fuera de combate, causando un efecto psicológico terrible sobre los tanquistas, y haciendo que las jefaturas planificaran medidas de seguridad para evitar las emboscadas, lo cual nunca fué suficiente.

ANIQUILAMIENTO DEL TRASIMENO (217)

      Esta batalla se llevó a cabo en el lago Trasimeno y enfrentó al cónsul romano Cayo Flaminio Nepote  con el General Cartaginés Aníbal. El aniquilamiento del Trasimeno fué ejecutado por Aníbal luego del cruce de los Alpes (218 a.C) La primera fase se abre con el avance de Aníbal desde España hacia los Alpes e Italia y su posterior victoria en Trasimeno que dejó a Roma sin otra defensa que sus muros y su guarnición. Los romanos habían destacado fuerzas a Marsella con el fin de cerrarle el camino a Aníbal con el Río Ródano. Este, sin embargo, no sólo cruzó sopresivamente este importante río aguas arriba, sino que tomó todavía más al norte para emprender el camino más díficil y desviado del Valle de Isére, en lugar de las rutas más directas de la Riviera, pero más fáciles de obturar. Cuando las fuerzas romanas llegaron al lugar del cruce del río, 3 días más tarde, quedaron atónitos y con sus rostros pálidos y enjutos al constatar que el enemigo había desaparecido, por cuanto estaban convencidos de que Aníbal nunca se atrevería a tomar ese camino para invadir Italia. El Comandante de esta fuerza italiana, encargada de detener al general cartaginés en su avance, dejó parte de su ejército y regresó a Italia por mar, a tiempo para encontrarse con Aníbal en las llanuras de Lombardía, pero allí el gran cartaginés tenía ventaja por la configuración accidentada del terreno ideal para el empleo de caballería, lo cual tuvo como consecuencia las victorias de Tesino y Trebia. Posteriormente Aníbal continuó haciendo lo que su genio le dictaba, que era atacar y moverse por los lugares menos pensados por el enemigo, desequilibrando su voluntad de lucha.

BATALLA DE CANNAS (216)

     Cannas es la expresión más cabal de lo que es el concepto de Guerra de Maniobras y el Ciclo OODA. La batalla de Cannas fué ejecutada el 02 de Agosto del 216 a.C, entre el Ejército Romano conducido por los cónsules Paulo Emilio y Terencio Varron. El ejército romano formó un dispositivo compuesto por 7 legiones de infantería pesada (55.000 Hombres), delante de este dispositivo una línea de infantería liviana de aproximadamente 15.000 Hombres, y en derredor, a la derecha y a la izquierda del dispositivo formó la caballería con 2400 y 4800 Hombres respectivamente. El ejército cartaginés al mando de Aníbal, estaba en franca desventaja numérica pero formó con el siguiente dispositivo sobre el terreno: una


primera línea de honderos y arqueros, detrás de ellos formó la infantería con 20.000 Hombres. Al igual que el dispositivo romano, la caballería se ubicaba a la derecha e izquierda de la infantería. La diferencia con los romanos fué que Aníbal mantuvo una reserva con 2 legiones detrás del dispositivo, una situada a la derecha y otra a la izquierda.

      El desarrollo de la batalla fué una verdadera guerra de maniobras porque:
Aníbal condujo al ejército romano hacia donde él quería, aferrando su infantería, dejándola que incida sobre su dispositivo. Al mismo tiempo aferró en los 2 extremos a la caballería para inmovilizarla. Aquí vemos que Aníbal, mediante una clara visión de la situación, accionó con los medios que tenía, pudiendo decir que introdujo la situación en el ciclo OODA. En este primer momento observó la situación, se orientó en base al dispositivo de los ejércitos y tomó unas primeras acciones, luego siguió aplicando el ciclo OODA. Ya que la infantería romano comenzó a ejercer mayor presión, entonces reforzó el dispositivo con la infantería liviana reubicándola para tal propósito. Podemos considerar que Aníbal colocó su esfuerzo principal en este lugar, esperando el momento oportuno para detectar una debilidad y actuar sobre ella con una reserva. El ejército romano siguió incidiendo tratando de abrir una brecha pero lo que sucedió fué que quedó en un dispositivo cercado en ambos flancos. Se presentó el momento oportuno cuando la caballería romana fué derrotada, entonces, Aníbal ordenó que sus reservas de 2 legiones que habían permanecido a la derecha e izquierda del dispositivo incidieran sobre amblos flancos. Luego de este movimiento de pinzas que dejó al ejército romano en el medio y sin libertad de acción, con su caballería atacó por la retaguardia romana encerrando totalmente al ejército de Paulo Emilio. Con cada acción del ejército cartaginés, Aníbal ponía a los romanos en una situación en la cual no podían accionar respuesta alguna, continuando una tras otra hasta quebrar su organización.

      En este ejemplo, se puede constatar como ANÍBAL hizo empleo de los siguientes aspectos de la guerra de maniobras:

Observación, Orientación y Rapidez en las decisiones y acciones
Desequilibró al enemigo al negarle la libertad de acción, conducirlo hacia un punto ciego en el terreno y mantener la iniciativa para influir sobre él.
Detectar debilidades y puntos decisivos para incidir en el esfuerzo principal.
Empleo de las reservas en contra-ataques junto con la caballería afectando simultáneamente al enemigo por varias direcciones y con distintos elementos.
Por último, controlando y teniendo pleno conocimiento de la situación.

      En conclusión, La batalla de Cannas en el 216 es una clara muestra de guerra de maniobras, Aníbal eligió el lugar de la lucha, utilizó su caballería para atacar flancos del enemigo y luego de derrotarlos, giró para caer en la retaguardia de las tropas de infantería romanas.

MANIOBRA EN LAS ARDENAS (1940)

       La incursión de la “Blitzkrieg” alemana en los bosques de las Ardenas aparece consustanciadan con el concepto de “guerra de maniobras”, el caso de la “Barrera Infranqueable” del bosque de las Ardenas durante la IIGM es ejemplificador, no sólo por la innovación de la masa en movimiento en confluencia con la potencia de fuego, sino también por todo el entretejido político y militar que se vislumbró en esos aciagos años. El plan certeramente estudiado por el mando alemán estaba a punto de tener éxito, y Gamelín había favorecido su ejecución al destacar en Bélgica a sus ejércitos más eficientes y preparados, convencidos en la idea de que los alemanes iban a tratar de reeditar una maniobra símil a la prevista en el viejo “Plan Schlieffen”.

      Para la ejecución definitiva de su operación, los alemanes debían superar aún el obstáculo geográfico representado por el Bosque de las Ardenas. Los franceses al abrigo de la fama que acumulaba dicha foresta, lo consideraban infranqueable, porque en los viejos tiempos del Mariscal Pétain, éste la definió como una barrera natural de la que no podía provenir ninguna amenaza ni peligro. Pero Pétain no había tenido en cuenta el adiestramiento y la superación que evidenciaba la WEHRMACHT, que había enseñado a las tripulaciones de los Panzer a suprerar barrers y desenvolverse en los bosques. Así, en la mañana del 13 de Mayo de 1940, las Panzerdivisionen dirigidas por los generales HOTH, REINHARDT, GUDERIAN y ROMMEL, agrupadas en el grupo acorazado Kleist, llegaron puntualmente al objetivo: Sedán. Al arribar a su objetivo, los alemanes mandaron ingenieros para medir la profundidad del río, a los efectos de poder vadear el Mosa y romper la línea adversaria. Por la tarde, los zapadores del regimiento “Grossdeutschland” atraviesan el río en canoas neumáticas y fuerabordos blindados para lanzarse al asalto de las casamatas francesas (Francia mantenía los supuestos de empleo de la guerra anterior, estática y de trincheras). Otro contingente había cruzado el Mosa más al norte en el sector de Dinant, donde operaba el IX ejército del General Corap, el más débil en armamento de los 3 ejércitos enviados a Bélgica, también el II ejército es inferior. Contra los ejércitos IX y II franceses se arroja la punta de lanza de la Wehrmacht, formada por 60 divisiones del grupo de ejército de Von Rundstedt. La cabeza de puente del otro lado del Mosa se amplió peligrosamente y con suma diligencia. Los Stukas y los Panzer actúan en perfecta sincronía y una avalancha de blindados penetra por la brecha, pulverizando la frágil resistencia francesa. En un tiempo record, los ingenieros alemanes montan decenas de puentes flotantes y los hombres de la Wehrmacht atraviesan el río bajo presión de fuego enemigo para llegar a segunda orilla. La derrota francesa se iba perfilando. “...He dado la orden de disparar sobre todo el que se rinda...” telefoneó el General Huntziger al General Georges, que era comandante del sector que va de Ambères a la Línea Maginot. “...Qué maniobra he de seguir...” pregunta Huntziger. La respuesta de Georges fué evasiva “...Actúe lo mejor que pueda...” en pocas horas sobreviene el fin. El “Blitz” del Ejército Alemán es a todas luces irrefrenable. Confusión y desánimo caen sobre las tropas aliadas.

      A las 7:30 del 15 de Mayo, Churchill es despertado por una llamada del Presidente del Consejo Francés, Paul Reynaud, que anuncia: “...¡Estamos derrotados!, ¡Hemos sido vencidos!...”. Posteriormente Churchill contaría en sus memorias que no podía creer que el gran Ejército Francés hubiera sido vencido en menos de una semana. En síntesis el ejército alemán penetró por un espacio al que Francia consideraba impenetrable y por el que no esperaba una maniobra ofensiva de tal magnitud, con esta maniobra, los alemanes desarticulan el sistema defensivo francés, dirigiéndose con energía y rapidez hacia el interior de país y en la profundidad del dispositivo galo. Esta acción tuvo un efecto paralizante en el Estado Mayor Francés y su Ejército. Las tácticas de “reconocimiento de arrastre” de la Blitzkrieg eran inherentemente desordenadas. Los altos comandos no podían dirigir ni predecir el curso exacto del avance. Pero los múltiples ataques de reconocimiento alemanes generaron confusión masiva en los franceses en 1940. cada oficial era informado con un nuevo ataque. Los alemanes parecían estar en todas partes, y los franceses, cuyo sistema requería certeza (al igual que los rusos) antes de tomar cualquier decisión, quedaban paralizados.

OPERACIÓN “DESERT STORM” (1991)

      Durante la contienda del Golfo que opuso a los Estados Unidos y aliados contra el Ejército Iraquí, se marcaron los 4 puntos del Ciclo Boyd (Rapidez de decisión y ejecución, exploración e inteligencia, desequilibrar al enemigo, y afectación simultánea del enemigo). Mucho antes de iniciarse las acciones militares, todos los elementos aprestados estaban emplazados y en posición de expectativa con objetivos claros: Destruir atacando simultáneamente al enemigo.

    Los primeros disparos de “Tormenta del Desierto” tenían que sonar a las 0240 de la madrugada, las dotaciones de armas pesadas se preparaban para incoar acciones desde horas de la tarde anteriores al horario de ataque, en campos de aterrizajes distribuidos por Saudí Arabia, Emiratos Árabes y Qatar. Varios Cruceros y el Acorazado “USS Wisconsin” habían apuntado miles de “Tomahawks” en sus lanzacohetes, también alistaron escuadrillas de B-52, una decena de Helicópteros de operaciones especiales inició el ataque destruyendo dos instalaciones de Radar situadas en la frontera saudí-iraquí, acompañados de bombarderos que penetraron en el espacio iraquí destruyendo sus principales bases antiaéreas, creando en virtud de ello un “pasillo estratégico” para los aviones norteamericanos. Desde el inicio de hostilidades, las FFAA norteamericanas tomaron el absoluto control del espacio aéreo y de las comunicaciones del enemigo.


SITIO DE TALCAHUANO, COMBATE DE GAVILÁN (1817)

    Esta contienda militar que opuso al Ejército Unido y al Ejército Realista y que es aplicable al concepto de maniobras, es el Combate de Gavilán, dónde los realistas a órdenes del General Osorio se aprestaban para lanzar su ofensiva sobre las tropas patriotas a órdenes del General Las Heras, ubicadas en el Cerro Gavilán, tropas que se encontraban disminuidas en número de combatientes y en materiales, que en transcurso no fué medrando. Aún con esa desventaja, el ejército patriota hizo frente al enemigo, sobre el flanco izquierdo de las tropas patriotas, se lanzó un ataque de los ejércitos realistas. Las Heras con un arrojo superlativo, y a través de su osada acción, logró accionar sobre el flanco del enemigo (Infantería) con la caballería, incidiendo claramente en el curso de la batalla. Los resultados fueron exitosos, pues de haber fracasado, todo el plan, la gesta, la epopeya libertadora en el continente quedaba en una posición francamente comprometida. Se materializó en esta acción la sincronización, la rapidez y movilidad aprovechando al máximo los desaciertos del enemigo, y explotando las capacidades y las ventajas propias que fueron volcadas sobre el dispositivo opositor llevando a la defección del enemigo.

GUERRA DE MALVINAS (1982)

     La Operación militar que es pertinente con el concepto estipulado, es el Combate en Top Malo House, que si bien desde la perspectiva operacional es considerado un   Golpe de Mano de comandos operativos “para la Guerra en Montaña y en Ártico” de los Royal Marines sobre una patrulla de Comandos Argentina en la Guerra de Malvinas, no es menos cierto que también en este combate se evidencian los signos del ciclo OODA. Se percibe la gran rapidez con la que actuaron los comandos británicos para descargar todo su poderío de combate en el momento y en el lugar decisivo gracias a una adecuada exploración y precisa inteligencia, afectando a su enemigo simultáneamente desde todos los frentes, desequilibrándolo e iniciando su persecusión.

PEARL HARBOR (1941)

     El caso de Pearl Harbor en la Segunda Guerra Mundial (IIGM) también es un claro ejemplo de cómo se reflejan los conceptos de “guerra de maniobras”, especialmente la rapidez y desequilibrio del enemigo por parte de los Japoneses que ocasionó la “sopresa estratégica” en su enemigo en el teatro del Pacífico.

CONCLUSIONES

 La Estrategia y la Maniobra han sido dos constantes en la historia de la humanidad incluso antes de que dichos concepto se internalizaran académicamente. La estrategia se fue remozando desde su primigenia concepción militarista y belicista al amparo de sus cultores de la Escuela Prusiana: Clausewitz, Luddendorf, Moltke, Liddell Hart, Schlieffen, Raymond Aron, extendiéndose a campos en donde

el empleo militar no es necesariamente prioritario, dando curso a otro tipo de metodologías indirectas (Escuela Francesa) notablemente la corriente Beaufre, que señala que la Estrategia es “...La dialectica de voluntades que utiliza la fuerza para resolver sus conflictos...” extendiendo el concepto a los estamentos de paz donde el fenómeno coactivo no implica necesariamente guerra y llegando a una bifurcación donde la estrategia operará por: DISUASIÓN y por ACCIÓN (Modos Directo e Indirecto). Luego asomaría la corriente anglosajona que considera a la estrategia tanto en la paz como en la guerra pero únicamente limitada al poder militar. El concepto de “Guerra de Maniobras” se imbrica directamente con la teoría estratégica a partir del pensamiento estratégico de grandes conductores militares que a través de la historia se valieron de sus ingenios y talentos para hacer la guerra  materializándolos en el campo de combate por medio de numerosas maniobras. En este artículo he citado numerosos ejemplos históricos, en donde se vieron aplicados los conceptos que evocan la maniobra aunados por la estrategia o el pensamiento estratégico de sus conductores. Este concepto fundado en las ideas del Coronel de la USAF John Boyd y refinado por William Lind y otros “exégetas” del USMC conserva aún vigencia en el moderno campo de batalla, aún a pesar de los adelantos tecnológicos que tienden a complejizar la guerra, porque como diría Napoleón: “...La guerra es un arte sencillo y de pura creación...”.


No hay comentarios: