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Un cura mendocino resiste junto a los cristianos en Irak.
María Laura Avignolo / CC
Luis Montes, misionero de la Orden del Verbo Encarnado, lleva tres años y medio destacado en Bagdad. Pese al acecho de la milicia integrista del ISIS -que persigue y asesina a grupos religiosos y étnicos minoritarios, incluso violando y decapitando- dice que se quedará con los cristianos “hasta el fin”.
En Irak, al menos 250.000 cristianos y yazidíes, una de las sectas más antiguas del mundo, huyen en masa de las decapitaciones, crucifixiones y ejecuciones de los fundamentalistas islámicos sunitas del Ejército del Levante e Irak (ISIS, sigla por las iniciales en inglés).
El terror se implantó con brutalidad. Las atrocidades y la huida a la montaña, a las zonas kurdas, de miles de personas, sin otra cosa que lo que llevan puesto, han generado una catástrofe humanitaria sin precedentes en ese país. Unos 50.000 yazidíes se encuentran aún en las montañas de Sinjar, con días de 50 grados centígrados, sin agua ni comida, y no logran ser rescatados, a pesar de la ayuda internacional desde el aire y los bombardeos estadounidenses al ISIS.
En Bagdad, en estos días desoladores, un sacerdote argentino se ocupa de acompañar a los cristianos perseguidos y en fuga por la brutalidad del ISIS.
El padre Luis Montes, un mendocino de la Orden del Verbo Encarnado -nacida en Argentina y con una de sus principales sedes en San Rafael-, ha cumplido tres años y medio en Irak.
Piensa quedarse allí, junto al padre Jorge Cortés, “hasta que no queden mas cristianos”, en medio de uno de los peores genocidios del siglo XXI contra ellos y los yazidíes.
-¿Como es la situación actual para los cristianos que están siendo perseguidos en Irak? ¿Por qué el ISIS los quiere eliminar?
-EI ISIS los persigue porque es un Islam fanático, que odia el cristianismo. Por eso, lo primero que hacen cuando llegan a un lugar de cristianos, es destrozar las cruces por el gran odio que le tienen a la cruz.
Frente a los que no aceptan lo que ellos dicen, la solución es la espada. Ya sean cristianos, yazidíes o chiítas. Los cristianos son los que sufren más porque, al ser una minoría, no tienen protección de nadie.
-¿No van a quedar cristianos en Irak?
-Es difícil saberlo. Desde la invasión estadounidense hasta ahora, se han ido entre cuatrocientos mil y un millón y medio de cristianos. Y con este tipo de acciones, se acentúa el éxodo.
Como párroco en la catedral, yo debo firmar los certificados de bautismo que necesitan para la visa y hay más gente que está viniendo ahora. Más que antes. Mucha gente lo hace simplemente para estar preparados, por si fuera a pasar algo más grave. No porque se quieran ir. Pero lo están pensando.
-¿Hay un plan para que puedan ir a otro país? ¿Europa les ha abierto las puertas?
-Las políticas europeas no las conozco. Yo sé que aquí la gente tiene mucha paciencia para pedir la visa. Pueden esperar años. Primero se van a un país árabe, donde permanecen el tiempo necesario para irse más lejos. En concreto, los países a donde han ido más son Canadá, Estados Unidos, Alemania y Australia.
-En este momento, EEUU está bombardeando las posiciones del ISIS. ¿Para usted es una solución, la gente está más tranquila con esta acción? Siente que pueden ser salvados?.
-La gente con la que yo he hablado en Bagdad está contenta con esto. Porque el ISIS quiere la destrucción de todos... La gente estaba esperando que alguien interviniese. No importaba quién. En general les ha parecido una buena idea. Lo que ocurre es que es un paso. Hay que hacer muchísimo más en todos los ámbitos. No se va a encontrar la solución viniendo con dos o tres aviones...
-Si vienen con más sería una situación netamente bélica...
-A lo que me refiero es que debe haber más trabajo para conseguir un gobierno de unidad y la presión de las potencias extranjeras puede ayudar en esto. Debe haber una presión sobre los países que ayudan al ISIS.
-¿Esto se puede catalogar de genocidio, o de limpieza étnica?
-Se dan las dos cosas. Lo que busca esta gente es exterminar a sus adversarios y lo hacen como “limpieza” étnica o “limpieza” religiosa. Y puede llegar a transformarse en genocidio por la magnitud que está teniendo.
En los últimos días, han huido 250.000 cristianos de sus casas. Hay niños muriéndose en el camino por el sol, hay 50 grados en el desierto. Hay gente que no tiene para comer, que se está enfermando. No se sabe qué va a pasar, si van a poder abrir las escuelas. La situación es absolutamente terrible.
-En Sanjir ha habido una verdadera masacre por parte del ISIS. Han decapitado, quemado las cruces, desalojado brutalmente a los yazidíes...
-La situación es atroz. Están cometiendo todas las atrocidades que quieren sin que nadie los frene.
-¿Es cierto que ejecutan, decapitan, que queman los manuscritos? ¿Las brutalidades que se describen del ISIS en las redes sociales son ciertas o son un elemento de propaganda?
-Yo no conozco todos los datos. Yo sé lo que las familias me han contado... Lo que hacen es raptar familias enteras, matar a los hombres, esclavizar a las mujeres, vender a los niños, eliminar a los adversarios... Toman represalias desproporcionadas contra todos los que combaten contra ellos. Esas atrocidades son verdades.
Después, otros detalles en concreto, yo no conozco. Pero hay datos que son ciertos: ellos queman todo lo que es cultura antigua, desacralizan las iglesias, las transforman en mezquitas, y está comprobado.
-También están expulsando de sus casas a las yazidíes, una de las sectas más antiguas del mundo. ¿Por qué los quieren ejecutar a ellos también?
-Ellos abominan de todo lo que no sea ellos mismos. En primer lugar, las víctimas fueron los cristianos, por el odio que le tienen al cristianismo. Pero el odio de ellos se extiende más. Se extiende a los que no piensan como ellos, incluidos musulmanes.
Los yazidíes fueron las siguientes víctimas a gran escala porque son también una minoría difícil de defender. Pero si no los contienen, van a ir por los musulmanes chiítas.
-Pero los chiítas de Irak tienen milicias, están mejor preparados para defenderse de un ataque como del ISIS. ¿Todo puede terminar en una tremenda guerra civil?
-Ciertamente puede terminar en una tremenda guerra civil. En los lugares que tomó el ISIS hay chiítas pero no han insistido tanto en ese punto. Probablemente lo quieran hacer en el futuro.
-¿En el norte han podido rescatar a los yazidíes o la artillería del ISIS lo impide?
-Por lo que he escuchado, algo de ayuda humanitaria ha llegado, arrojada desde aviones, pero es poco en comparación con las necesidades. Se habla de al menos 50.000 personas rodeadas, sin siquiera agua.
-El gobierno iraquí ha cambiado ayer. Han cambiado el primer ministro chiíta Nouri Al Maliki por otro chiíta, Haider Al Abadi. ¿Existe alguna posibilidad de que se consiga la unidad y que las tribus sunitas dejen de apoyar al ISIS como hasta ahora, después de haber confrontado todo este tiempo con el ex primer ministro Al Maliki?
-Existe la posibilidad. Es un buen paso. Lo que hay que ver es si la persona elegida está a la altura de las circunstancias. En principio, el gobierno de unidad es lo que más serviría en este momento.
Porque las tribus sunitas son muy fuertes y ellos dejaron entrar a los del ISIS caminando, por el descontento contra el gobierno. Han hecho declaraciones explícitas: "Contra el ejercito no tenemos nada, nuestro problema es contra el gobierno". Cambiado el gobierno, es posible que cambie la situación. El tema es que Al Maliki fue elegido por mayoría de votos. El no va a estar contento con esta solución.
-En estas condiciones, padre, ¿ustedes se van a quedar en Bagdad o se van a retirar, como han hecho muchos diplomáticos?
-En principio nosotros nos quedaríamos mientras haya cristianos. Nosotros estamos aquí por ellos y queremos estar con ellos hasta el fin. Pero nadie sabe qué va a pasar. Puede ser que pase lo peor, puede ser que no. Pero el principio es quedarnos con ellos, con el pueblo al que elegimos servir.
-¿El perdón no les sirve a los musulmanes?
-No hay perdón entre los musulmanes. Para esta gente hacerle mal al que le ha hecho mal, no sólo esta permitido, sino que es una obligación. Ojo por ojo, diente por diente. Ellos tienen que devolver el mal. El perdón para ellos es un defecto.
Por eso persiste el problema que hay en Tierra Santa: tanto los judíos como los musulmanes desconocen el perdón. El gran rabino de Roma, que se convirtió al cristianismo en la Segunda Guerra Mundial, decía que el perdón para un judío es una falta contra la justicia.
Quien quiera comunicarse o apoyar al padre Luis Montes en Irak, pueden hacerlo a través de la página web http://amigosdeirak.verboencarnado.net/presentacion/.
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