EDUCACIÓN PERMANENTE

                                                      La educación permanente retoma el aprendizaje profesional

                                                      constante y continuo para lograr la actualización intelectual,

                                                       a lo largo de la vida y, así, continuar siendo creativo.

por Carlos E. Laidlaw (*) - Especial para Espacio Estratégico.

El joven Cicerón leyendo. Fresco por Vincenzo Foppa.
1464. Brescia.

La educación permanente es una actividad voluntaria de cualquier profesional, en este caso militar retirado, que desea realizar en forma continua y constante el desarrollo de nuevos conocimientos, hasta llegar al fin de su vida, iluminado por el fuego sagrado alimentado por la necesidad de mantener actualizados los mismos obtenidos a lo largo de su carrera, para continuar su tarea especialmente del ejercicio del magisterio, inspirado en famosa expresión de Marco Tulio Cicerón (106 / 43 a.C.): “si vis scire, docere”, Si quieres aprender, enseña, que puede llevarlo al aprendizaje a través de la lectura y de la investigación en temas de su especialidad.



Se denomina educación permanente o continua al tipo de educación en la que se destaca el carácter actualizador del fenómeno educativo y el hecho de que el proceso no finalice, y sea duradero. Entre los hitos educativos que caracterizan la historia de la educación, el de la educación permanente ocupa un lugar relevante. Desde sus distintas perspectivas abarca una gran variedad de objetivos, persigue un alto grado de bienestar y está vinculado a múltiples causas. [1]

Según la UNESCO es “El conjunto de procesos de aprendizaje formal o no, gracias al cual las personas cuyo entorno social considera adultos desarrollan sus capacidades, enriquecen sus conocimientos y mejoran sus competencias técnicas o profesionales o las reorientan a fin de  atender sus propias necesidades y las de la sociedad.

La educación de adultos comprende la educación formal y la educación continua, la educación no formal y toda la gama de oportunidades de educación informal y ocasional existentes en  una  sociedad  educativa  multicultural  en  la  que  se  reconocen los enfoques teóricos y los basados en la práctica.

La educación de adultos se  concibe, en  términos generales y  dinámicos, en  el marco de  un aprendizaje a lo largo de la vida”.

Tal actividad puede llevarlo a potencialmente a 3 planos horizontales: “a) Obtener conocimientos prácticos, aplicativos, “Saber para obrar”;  b) Resolver u opinar sobre problemas que obligan a Pensar, c) Enseñar el Método, para que, en base a los conocimientos resuelva el problema, de la mejor manera”

Tales hechos están guiado por 3 fines:”a) Formar y perfeccionar hombres que sepan Pensar (para tomar decisiones correctas), b) Formar y perfeccionar Personas de bien, que piensen, sientan y quieran  "los tres planos horizontales,  de acuerdo con un recto sentido ético, "el plano vertical ", que une las acciones horizontales como su columna vertebral" , c) Formar y perfeccionar profesionales libres y cultos”.

Todo ello le permite pensar sobre el Sentido del Porvenir, sobre la base del pasado, para evitar responder negativamente a las siguientes preguntas: [2] “1) ¿Qué ha hecho Ud. con su tiempo?; 2) ¿En que lo ha invertido?; 3) ¿Qué grado de autoaprendizaje ha alcanzado Ud.?; 4) ¿Hasta qué punto lo ha reconocido como indispensable para su propia profesión?

Estas cuestiones que parecen abstractas sólo prueban que el hombre, en la medida en que se pregunta por el sentido de su vida, es un ser filosófico.

Y cuando abandona el campo de la reflexión filosófica, abandona el campo de su autoestima, el campo de su dignidad, el campo de su consideración ética primordial. El progreso empieza en el momento en que se lucha contra la propia mediocridad. 

El hombre vive en la medida en que puede tener una experiencia del porvenir”.

Allí entran los valores, algo importante por sí mismos en cualquier tiempo y lugar. Es un bien que nos llama y que exige de nosotros una respuesta. De esa respuesta, positiva o negativa, depende todo. Nada menos que la diferencia entre lo bueno y lo malo, el gran reto para la libertad humana, particularmente la Educación Permanente.

Los valores morales [3] son esenciales, perennes y universales. El conocimiento de los valores y la toma de conciencia sobre su trascendencia y necesidad representan para todos un logro inestimable.

La experiencia patentiza su vivencia su trascendencia en la vida personal y de la sociedad que no debe separarse del conocimiento y del estudio

En esta decisión diaria, constante, vamos construyendo nuestra personalidad y con ella el tipo de persona que queremos ser

REFERENCIAS:

[1]  https://es.slideshare.net/MJuradoA/educacion-permanente-39718151
[2]  Santiago Kovadlof “El Sentido del Porvenir”
[3]  Adaptado por María Elena Buitrago

(*) General de División (R) del Ejército Argentino.