Las alianzas estratégicas que se pierde la Argentina.

FUENTE: http://ceestaromana.blogspot.com.ar/2013/08/resumen-diario-de-noticias-22-ago-13.html


LAS ALIANZAS SON AMORES.
CEE SANTA ROMANA
A esta altura del partido, por el balance mundial, a nadie se le escapa que el tema se dirimirá entre varios sistemas de alianzas. Por un lado, estará China y sus aliados. Y por el otro los EE.UU. y Europa con los suyos. Quedará afuera algún jugador solitario, como Rusia, que buscará .como siempre- ser cabeza de serie. Habrá que ver si lo logra.
La historia y la geografía, nos guste o no, acercan a nuestra Nación con los EE.UU. y con Europa. Lo que no implica –necesariamente- llevarse mal con China ni con Rusia.


Para concretar este vínculo hay dos caminos posibles. Uno es aprovechar la Cuenca del Océano Atlántico y el otro, la del Pacifico. Una tercera posibilidad sería beneficiarse con ambas alianzas, lo que sería aún mejor. Lo que queda claro que, al menos, hay que concretar una de ellas. En el primer caso, habría que aliarse a la Unión Transatlántica de Comercio e Inversión (o TTIP por sus siglas en inglés)[1].. Un acuerdo de libre comercio entre los EE.UU. y la Unión Europea. En el segundo caso, lo conveniente sería llegar a un acuerdo con la Alianza Transpacífica (o TPP por sus siglas en inglés)[2]. Una que los EE.UU. están tejiendo con sus socios asiáticos, como Japón y Australia.



¿Cómo hacerlo? Al momento no hay otro camino que no sea el consolidar primero y como base una sólida alianza estratégica con nuestros socios de siempre. Esto es: con la República Federativa del Brasil y con la República de Chile. Pues, la alianza con Brasil nos permite conectarnos hacia la Cuenca del Atlántico y la asociación con Chile nos permite hacerlo hacia la del Pacífico. Esto ya lo vio el Grl. Perón cuando en la década del 40 hablaba del ABC.



¿Qué estamos haciendo para lograrlo? Nada, o muy poco. Parece casualidad, pero puede que no lo sea. Esta semana nos enteramos de dos hechos que conspiran contra estas alianzas esenciales para con nuestros intereses vitales. El primero: se acaba de anunciar la adjudicación de las represas patagónicas a la firma local Electroingeniería con financiamiento chino. Esto, seguramente, no debe haber caído muy viene en Brasilia, que tenían la esperanza de ganar esta licitación y enmendar así lo de Vale. El segundo, es casi cómico. Se le conmina a la empresa aérea de origen chileno LAN, en solo diez días, a dejar de operar sus vuelos de cabotaje desde el Aeroparque metropolitano, cuando tenía un contrato que le garantizaba la permanencia hasta el 2015. Hay información de que el Presidente Sebastián Piñeira acaba de enviar a su canciller a nuestro país para negociar tan incómoda situación.



También, podríamos comentar un hecho menor, aunque significativo, con fueron los desentonados dichos de nuestra Embajadora para con el Premier del reino Unido de la Gran Bretaña. Uno que parece reforzar la tendencia que marcan los dos hechos señalados más arriba. Una tendencia caracterizada por un hostil aislamiento nacional, cuando la estrategia les aconseja, a los países emergentes como el nuestro, todo lo contrario, si es que desean progresar y desarrollarse plenamente.

 

 

[1] Transatlantic Trade and Investment Partnership es una zona de libre comercio propuesta, por primera vez en los 90 y nuevamente en el 2007, entre los EE.UU. y la Unión Europea.  

 

[2]  Trans-Pacific Partnership es un acuerdo de libre comercio entre Brunei, Chile, Nueva Zelanda y Singapur firmado en el 2005.  En el 2010,  se inician las negociaciones para expandirla a Australia, Canadá, Malasia, México, Perú, los EE.UU., Vietnam y Japón.  Todos se unen en el 2012. En ese año, Corea de Sur declina hacerlo.