Estrategia - Relaciones Internacionales - Historia y Cultura de la Guerra - Hardware militar. Nuestro lema: "Conocer para obrar"
Nuestra finalidad es promover el conocimiento y el debate de temas vinculados con el arte y la ciencia militar. La elección de los artículos busca reflejar todas las opiniones. Al margen de su atribución ideológica. A los efectos de promover el pensamiento crítico de los lectores.

jueves, 4 de febrero de 2021

Para los EEUU contener a China no es una opción viable

COMENTARIO:  ¿Es posible que los EEUU y China, en lugar de confrontar, busquen una suerte de cooperación? No lo sabemos. Pero, no puede descartarse esta posibilidad. Ya que sea uno u otro escenario. Muy distintas serán las posibilidades y las estrategias disponibles para un país como el nuestro.





https://www.ft.com/content/83a521c0-6abb-4efa-be48-89ecb52c8d01

 

 Martin Wolf


¿Cómo debería reaccionar Estados Unidos ante el ascenso de China? Esta es una de las preguntas más importantes que enfrenta la nueva administración estadounidense. Muchos estadounidenses dicen que es posible alguna forma de contención. De hecho, este es uno de los pocos puntos en los que la administración de Joe Biden y la de su predecesor, tienden a estar de acuerdo. También, podemos ver la ventaja política: un enemigo común puede unificar a un país dividido. Pero, ¿es esta realmente una política alcanzable? Creo que la respuesta es no.

Una visión esencialmente nula de la relación entre Estados Unidos y China está contenida en “The World Turned Upside Down” de Clyde Prestowitz. Insiste en que: "No hay disputa entre el pueblo chino y el pueblo de los Estados Unidos". Su objeción se dirige más bien al Partido Comunista. Una visión similar infunde El “telegrama largo” (1): hacia una nueva estrategia estadounidense para China, escrito por un "ex alto funcionario del gobierno" anónimo (en referencia al telegrama largo de George Kennan de febrero de 1946, que proponía contener a la Unión Soviética). También afirma que: “El desafío más importante que enfrenta a los Estados Unidos en el siglo XXI, es el surgimiento de una China cada vez más autoritaria bajo la presidencia. . . Xi Jinping”. El desafío, afirma, no es China, sino su estado despótico.


El aumento de la producción per cápita en China
aún puede tener un largo camino por recorrer


Simpatizo con la ansiedad que invade estos mensajes. Las acciones de China en Xinjiang y Hong Kong subrayan su desprecio por los derechos humanos y los acuerdos internacionales. Beijing amenaza la autonomía de facto de Taiwán y extiende su control sobre el Mar de China Meridional. En resumen, China se está comportando cada vez más como una gran potencia en ascenso dirigida por un déspota despiadado y eficiente.

El “telegrama largo” sostiene que la amenaza del intento de China de lograr la dominación mundial debe enfrentarse defendiendo una larga lista de intereses estadounidenses vitales: el mantenimiento de la superioridad económica y tecnológica colectiva; proteger el estado global del dólar estadounidense; mantener una abrumadora disuasión militar; prevenir la expansión territorial china, especialmente, la reunificación forzada con Taiwán; consolidar y ampliar alianzas y asociaciones; y defender (y, si es necesario, reformar) el orden internacional basado en reglas liberales. Sin embargo, simultáneamente, el documento pide abordar las amenazas globales comunes, incluido el cambio climático.

la participación de China en la población mundial disminuirá,
pero seguirá superando a la de Estados Unidos y sus aliados


China probablemente tendrá la mayor economía del mundo a precios de mercado muy pronto

¿Es todo esto alcanzable? No, no lo creo.

Primero, China es un adversario mucho más poderoso que la Unión Soviética. Tiene una economía mucho más próspera, un sector tecnológico más dinámico, una población mucho más grande, un sistema político más cohesionado y un gobierno mucho más competente. El desempeño económico relativo de China es asombroso.

Más importante aún es su potencial. China enfrenta enormes desafíos económicos. Pero no es necesario administrarlos bien para tener la economía más grande del mundo. En la actualidad, la producción per capita de China (en paridad de poder adquisitivo) es un tercio de la de Estados Unidos (frente al 8 por ciento en 2000) y la mitad de la de la UE. Supongamos que esto es solo la mitad del nivel de los EEUU. Para 2050. La economía de China sería tan grande como las de EE. UU. Y la UE juntas.


El aumento de la producción per capita en China
aún puede tener un largo camino por recorrer

En segundo lugar, la economía china está muy integrada a nivel internacional. Si bien esta es una fuente de vulnerabilidad para China, también es una fuente de influencia. El mercado chino ejerce una atracción magnética en una multitud de países de todo el mundo. Como señala el investigador de Singapur Kishore Mahbubani, la mayoría de los países quieren buenas relaciones con los Estados Unidos y con China. No estarán felices de elegir a Estados Unidos por sobre China.


Finalmente, durante las últimas dos décadas y, especialmente, los últimos cuatro años, los Estados Unidos ha devastado su reputación de sentido común, decencia, confiabilidad e incluso adherencia a los estándares democráticos básicos. Esto importa, porque sus aliados serán cruciales en el combate previsto. Como afirma Jonathan Kirshner en “Foreign Affairs”, “El mundo no puede ignorar la presidencia de Trump”, especialmente su vergonzoso final. Peor aún, este aspecto de los Estados Unidos, claramente, sigue vivo. Los Estados Unidos solía hablar de la necesidad de que China sea un "actor responsable". Pero después del orgullo del “momento unipolar”, la guerra en Irak, la crisis financiera y la presidencia de Donald Trump, ¿Estados Unidos es un actor responsable?

la participación de China en la población mundial disminuirá,
pero seguirá superando a la de Estados Unidos y sus aliados

Esto no pretende aconsejar la desesperación. Es reconocer la realidad. Entonces, ¿qué podemos hacer?


Primero, los Estados Unidos y sus aliados deben revitalizar sus democracias y sus economías. En este último caso, deben proteger su autonomía tecnológica. Pero la forma más importante de hacerlo es revitalizar su infraestructura científica y tecnológica, incluso renovando la educación y alentando la inmigración de personas talentosas.



El gasto militar de Estados Unidos y sus aliados
aún supera con creces al de China y Rusia


En segundo lugar, deben defender los valores fundamentales de adhesión a la verdad y a la libertad de expresión contra todos los enemigos, nacionales y extranjeros (incluida China). También, deben unirse para hacer esto. No se debe permitir a China perseguir a países pequeños e intimidarlos uno por uno.


En tercer lugar, deben renovar las instituciones de la economía mundial que han creado y elaborar nuevas reglas multilaterales que obliguen al comportamiento de China y por las que ellos también estarán sujetos.

para algunos países importantes,
el mercado chino es realmente importante

Cuarto, los Estados Unidos y sus aliados deben aclarar qué intereses fundamentales defenderán, si es necesario por la fuerza.


Por último, pero no menos importante, deben centrar su atención, como lo ha hecho ahora Biden, en el proyecto común de proteger los bienes comunes mundiales para todos nosotros.


La relación de Estados Unidos con China no es así con la Unión Soviética. Sí, habrá mucha competencia, pero, también, debe haber una cooperación profunda. En la medida en que hay una guerra de ideologías, la libertad y la democracia de Occidente siguen siendo más atractivas. El verdadero desafío al que se enfrentan no es China, sino la restauración de estos valores en casa.

Traducción y nota: Carlos Pissolito

Nota:

El "telegrama largo", conocido también como "Artículo X", fue un ensayo publicado en la revista "Foreign Affairs" en 1947, firmado con el seudónimo "X". Aunque, siempre se supo que su autor era George F. Kennan, segundo jefe de misión en la embajada de Estados Unidos en la URSS. El artículo era una ampliación de un cable diplomático, conocido a su vez como el "telegrama largo", en el cual se fijaban las bases de la doctrina de la contención.


No hay comentarios: