¿Deben temer los EEUU la ira de sus legiones?

 

por Carlos A. PISSOLITO

La famosa trilogía de J Larteguy.

“Nos habían dicho, al abandonar la tierra madre, que partíamos para defender los derechos sagrados de tantos ciudadanos allá lejos asentados, de tantos años de presencia y de tantos beneficios aportados a pueblos que necesitaban nuestra ayuda y nuestra civilización.

Hemos podido comprobar que todo era verdad, y porque lo era, no vacilamos en derramar el tributo de nuestra sangre, en sacrificar nuestra juventud y nuestras esperanzas. No nos quejamos; pero, mientras aquí estamos impulsados por este espíritu, me dicen que en Roma se suceden conjuras y maquinaciones, que florece la traición y que muchos, cansados y conturbados, prestan complacientes oídos a las más bajas tentaciones de abandono vilipendiando así nuestra acción.

No puedo creer que todo esto sea verdad, y sin embargo las guerras recientes han demostrado hasta qué punto puede ser perniciosa tal situación y hasta dónde puede conducir.

Te lo ruego, tranquilízame lo más pronto posible y dime que nuestros conciudadanos nos comprenden, nos sostienen y nos protegen como nosotros protegemos la grandeza del Imperio.

Si ha de ser de otro modo, si tenemos que dejar vanamente nuestros huesos calcinados por las sendas del desierto, entonces ¡Cuidado con la ira de las legiones!”

Aunque sepamos, hoy,  que esta carta de Marcus Flavinius, Centurión de la segunda cohorte de la legión Augusta, a su primo Tertulio en Roma, es solo una recreación del escritor francés Jean Larteguy para su famoso libro “Los Centuriones” que vio la luz en 1960, a caballo de la guerras de Indochina y de Argelia. 

También, sabemos que la OAS (Organisation armée secrète), una organización secreta conformada por militares franceses descontentos con la independencia de Argelia otorgada por el Presidente de Francia, Charles Charles de Gaulle, trataron de asesinarlo el 22 de agosto de 1962. Luego de haber contribuido a entronizarlo como "un presidente de la república con poderes constitucionales excepcionales" a cargo de la 5ta República. 

Por lo que la mencionada carta, bien podría haber sido escrita, no solo por un centurión romano, sino por cualquier militar que se sienta traicionado por un régimen político cualquiera. Como ha sucedido varias veces en la historia. 

Nada nuevo bajo el Sol, si consideramos que fue César Augusto (27 a. C.-14), fue el primer emperador romano quien creó a la Guardia Pretoriana. Un cuerpo militar de élite, destinado a cuidar la vida de los emperadores, pero que se hizo famoso por su hábito de nombrarlos y de asesinarlos cuando no eran de su agrado.

Volviendo a nuestro presente. Ya pocos niegan que los militares de las FFAA sudamericanas están teniendo un mayor protagonismo político, tal como lo expresamos en un artículo con el Dr. Miguel Barrios, hace dos años atrás. (ver: https://espacioestrategico.blogspot.com/2018/10/hacia-una-revalorizacion-de-lo-militar.html)

En otros escritos, hemos hablado de la posible “argentinización” o “latinoamericanización” de la política doméstica de los EEUU. Un idea que escuché, por primera vez, de boca del estratega rumano-norteamericano Edward Luttwak, en el 2002 (ver: https://espacioestrategico.blogspot.com/2020/09/el-libro-que-no-cambio-el-futuro-pero.html)

Hoy, esa tendencia parece haber alcanzado a las relaciones entre el poder civil y sus FFAA.

Hasta hace algunos años atrás los EEUU practicaban lo que se conoce como “el control civil objetivo de sus FFAA”. El mismo, explicado por Samuel P. Huntington, se traduce en una forma de control civil basada en el esfuerzo en incrementar el profesionalismo del cuerpo de oficiales, alejándolos de la esfera de influencia de la política. 

La mismas, contrasta su “control objetivo” con lo que él llama el “control subjetivo”, que tiene por objetivo domar a los militares, civilizándolos, haciéndolos políticamente aceptables o controlándolos mediante elites civiles trasplantadas. (https://drive.google.com/drive/folders/0B4_Oajmq32ttTHdQeUMxZGhld3M) 

Por supuesto que esto es la teoría y otra, muy distinta, puede haber sido la práctica. Para hacer una explicación larga muy corta digamos que ya el Presidente D Eisenhower acusó al complejo militar-industrial en su discurso de despedida el 17 de enero de 1961 de ejercer una influencia injustificada. Una que, por ejemplo, se materializa en el nombramiento de militares coptados por ellos para los puestos de mando. Lo que parecería ser el caso del jefe de estado mayor conjunto nominado por J Biden. Un militar retirado con amplias conexiones con esa industria.

Pero, las cosas no habrían parado en la influencia de poderosos grupos empresariales. Más recientemente, se extendió a la pretensión de cambiar la vieja cultura militar, mayormente, conservadora y tradicionalista, por la imposición de las denominadas políticas de género durante la administración Obama. (ver: https://espacioestrategico.blogspot.com/2017/12/sexual-harassment.html) 

Estas dos tendencias han dado lugar a una grieta en el interior de las FFAA norteamericanas. ya que mientras que los mandos superiores se sienten dispuetos a seguir las políticas del Establishment político, los cuadros medios y bajos están más cerca de los sentimientos de un centurión traicionado.

Así como ya dijimos más arriba,  J Biden ha elegido para el máximo puesto militar a un referente del complejo militar industrial. El “Deep State” que colabora con él, está haciendo lo posible para purgar a las FFAA de elementos simpatizantes de D Trump.

Concretamente, el FBI está examinando a los 25.000 soldados de la Guardia Nacional que se dirigen a Washington D.C. Ya  que son muchos los temores entre los funcionarios de Defensa de que los responsables de la seguridad en la inauguración puedan participar en un ataque interno, tal como informó la agencia The Associated Press. (Ver: https://thehill.com/policy/national-security/534669-fear-of-insider-attack-prompts-additional-fbi-screening-of-national)

Por su parte, el secretario del Ejército, Ryan McCarthy, le dijo a la AP que los funcionarios están al tanto del riesgo potencial y que los comandantes han recibido instrucciones de estar atentos a cualquier problema entre sus tropas. Los miembros de la Guardia Nacional también están recibiendo capacitación sobre cómo encontrar amenazas dentro de sus filas.

Qué pasará no lo sabemos con certeza. Pero, la historia está allí y como decía el genial Cervantes: es nuestra maestra de la vida.